Terminado el pequeño repaso a la palabra ludus, vamos con iocus.
El diccionario de la Real Academia dice que la palabra “juego” procede del latín iocus. Podemos leer en esta acepción:
juego.
(Del latín iocus).
- m.Acción y efecto de jugar.
- m. Ejercicio recreativo sometido a reglas, y en el cual se gana o se pierde. Juego de naipes, de ajedrez, de billar, de pelota.
- m.Cada uno de los que se juegan con naipes, y se distinguen por nombres especiales;p. ej., la brisca, el solo, el tresillo,etc.
- m.juego de azar.
- m. En los juegos de naipes, conjunto de cartas que se reparten a cada jugador.
- m. En el juego del mus, cuarto lance de la partida, que solo se lleva a cabo cuando el valor de las cartas de al menos un jugador alcanza 31 o más tantos.
- m.Disposición con que están unidas dos cosas, de suerte que sin separarse puedan tener movimiento relativo; como las articulaciones, los goznes, etc.
- m.Ese mismo movimiento.
En el ya mencionado diccionario de Lewis y Short disponible en Philolog.us leemos sobre iocus (realizamos una selección de los textos que aportan y los traducimos):
jŏcus, i (plural también joca, jocorum, neutro; así siempre en Cicerón), masculino quizás parecido al Sánscrito; raíz distinta, ludere; cf. iucundus.
- Broma, chanza, burla (clásico): at vero adhibes joci causa magistrum suffragium tuum et compotorum tuorum rhetorem = verdad es que llevas contigo un bufón que, en tu concepto y en el de tus compañeros de embriaguez, es un maestro de retórica (Cicerón, Filípicas. 2, 17, 42); Nam haec perpetua contra Scaevolam Curiana defensio tota redundavit hilaritate quadam et joco = pues esa contínua defensa de Curio contra Escévola se desbordó toda en cierta hilaridad y broma (Cicerón, De Oratore 2, 54, 221); neque enim ita generati a natura sumus, ut ad ludum et jocum facti esse videamur = Ni tampoco hemos sido creados por la naturaleza de forma que parezca que estemos hechos para el juego o broma. (Cicerón De officiis 1, 29, 103). Ioca atque seria cum humillimis agere = trataba asuntos de broma y serios con los más humildes (Salustio, Guerra de Yugurta, 96, 2); conviva joco mordente facetus = comensal divertido por tus chascarrillos picantes (Juvenal, Sátiras IX); Iovem memorant … agitasse jocos cum Iunone = dicen que Júpiter se puso a bromear despreocupadamente con Juno (Ovidio, Metamorfosis III, 320); sine amore iocisque nil est iucundum, vivas in amore iocisque = si no hay nada agradable sin amor ni juegos, vive rodeado de amor y de juegos (Horacio, Epístolas 1, 6, 65); quid quod materiam praebet causas jocorum omnibus hic idem = ¿qué diré de la materia y causa de chanzas que suministra a todos este mismo pobre? (Juvenal, Sátiras III, 147); mille facesse jocos: turpe est nescire puellam ludere = practica mil juegos; es vergonzoso que una mujer no sepa jugar (Ovidio, Ars Amatoria 3, 367)
Ernout y Meillet, en su Dictionnaire Étymologique de la Langue Latine, escriben:
Iocus, -i masculino (plural ioci y colectivo neutro ioca): juego de palabras, broma. Iocus, ioca se oponen a serium, seria, en un doblete antitético en asíndeton ioca seria; cf. Cicerón, De Finibus 2, 26, 85, quicum ioca, seria, ut dicitur, (lo serio y lo jocoso, como suele decirse). Unido igualmente a ludus “juego de acción”; cf. Cicerón De Officiis I, 29, 103, ut ad ludum et iocum facti videamur (parezca que estemos hechos para el juego y la broma); Tito Livio 28, 42, 2 ludus et iocus ( ne tibi, P. Corneli, cum ex alto Africam conspexeris, ludus et iocus fuisse Hispaniae tuae uidebuntur. quid enim simile? = Escipión, ¿cuándo contemplaste África desde el mar no te pareció tu conquista de Hispania un juego de niños? ¿En qué se parecen?. De ahí per iocum (por juego, en broma). Antiguo y usada. Ha suplantado a ludus en las lenguas romances.
En español sólo tenemos la palabra ludo, sinónimo de parchís, en Argentina, Chile, Perú, Uruguay y Venezuela.
Los demás términos son:
lúdico, ca.
(Del latín ludus, juego, e ‒́ico).
- Perteneciente o relativo al juego.
ilusorio, ria.
(Del latín illusorĭus). Procede del verbo illudo (formado sobre ludo) que significa “jugar con, burlarse de, maltratar”
- adjetivo. Engañoso, irreal, ficticio.
- adjetivo. De ningún valor o efecto, nulo.
ludopatía.
(Del latín ludus, juego, y –patía = sufijo que significa “enfermedad”).
- Adicción patológica a los juegos electrónicos o de azar.
Vista la diferencia entre iocus y ludus, vamos ya con la frase escrita con tiza en una pizarra verde ante la mencionada tienda de Homoludicus.
La frase es: En el juego demostramos realmente quienes somos (Ovidio)
He buscado dónde puede aparecer esta frase en Ovidio, aunque sin demasiado ahínco, pero no lo he encontrado; tal vez ni siquiera es de Ovidio. El Arte de Amar o Amores podrían ser obras donde apareciera la frase, pero nada es seguro.
Si algún lector lo sabe, le rogaría que me lo dijera.
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Actualizo el artículo con la magnífica aportación de Fernando Maximiliano que nos dice que el verso es el 372 del libro III del Ars Amandi de Ovidio. Nudaque per lusus pectora nostra patent = por el juego se ofrecen desnudos nuestros corazones = por el juego se expone nuestro corazón al desnudo.
Es decir, en el juego demostramos realmente quiénes somos, como rezaba el cartel.
Situémoslo en contexto:
mille facesse iocos; turpe est nescire puellam
ludere: ludendo saepe paratur amor.
sed minimus labor est sapienter iactibus uti:
maius opus mores composuisse suos. 370
tum sumus incauti, studioque aperimur in ipso,
nudaque per lusus pectora nostra patent;
ira subit, deforme malum, lucrique cupido,
iurgiaque et rixae sollicitusque dolor:
crimina dicuntur, resonat clamoribus aether, 375
invocat iratos et sibi quisque deos:
nulla fides, tabulaeque novae per vota petuntur;
Aprende estos juegos tan divertidos; es de mal tono que una joven los desconozca, y muchas veces jugando suele brotar el amor. No requiere gran talento el aprenderlos a la perfección; más difícil es al jugador aparecer dueño de sí mismo. A veces por falta de prudencia la pasión nos arrebata, y un accidente cualquiera deja ver nuestro carácter al desnudo; estalla la cólera, siempre aborrecible, el afán de lucro suscita cuestiones y produce quejas amargas, se apostrofan los contendientes unos a otros, el aire resuena con los clamores, y cada cual invoca en su favor a los dioses irritados, piérdese la confianza entre los que juegan, y piden que se cambien los tableros.